En Madrid hay una larga lista de posibilidades para disfrutar de una buena comida o charla con amigos mientras tomas un café sin tener que dejar a tu perro en casa. Es cierto que durante el verano el problema se resuelve más fácilmente yendo a terrazas, pero, ¿qué pasa cuando hace frío? En Madrid son ya muchos los bares y restaurantes que no ponen impedimentos a la entrada con mascotas, y que humanos y canes puedan compartir su tiempo de ocio.
Hasta hace poco tiempo solo se podía entrar en los restaurantes con los perros guía, pero con el paso de los años la sociedad ha ido concienciándose sobre la posibilidad de disfrutar del tiempo libre con animales y ya cada vez existen más hoteles, bares y restaurantes donde se admiten mascotas. Este cambio de mentalidad y la irrupción del perro educado y sociable en muchos barrios de Madrid explican que la lista de establecimientos dog-friendly esté aumentando considerablemente.
Comenzamos hablando de Mür Café, un local de estilo rústico-industrial con clara inspiración europea, donde además de ofrecerte productos naturales cuidadosamente escogidos y deliciosas recetas caseras, tanto dulces como saladas, también se preocupan de los clientes peludos colocando un cuenco con agua en la puerta y en el interior, además de un gran bote repleto de galletas para canes. En Mür Café te sentirás como en casa en cualquiera de sus rincones, los sillones chester, la mesa comunal hecha con madera de derribo, el rincón de las butacas, los sillones alrededor de la estufa de mica, o junto al balcón mientras contemplas la plaza. Dirección: Plaza Cristino Martos, 2.
Si buscas un plan distinto a sentarte en una mesa a comer, no lo dudes, pásate por Kikekeller, espacio donde se combina el arte con la restauración. Nada más entrar por la puerta sentirás la necesidad de de llevarte a casa todos sus muebles hechos a medida y restaurados por ellos mismos, y estarás de suerte, porque están en venta. Esta tienda-galería-café también se puede alquilar para eventos. Los perros son más que bienvenidos, y les darán agua y quizás, alguna chuche. Dirección: Corredera Baja de San Pablo, 17.
Lolina es un café vintage decorado con muebles y papeles pintados originales de los años 50, 60 y 70. Tiene el encanto de una casa de muñecas en la que todo resulta familiar y acogedor y donde no puede faltar la compañía de tu perro, que es bienvenido en este luminoso, colorido, acogedor y alegre lugar. Un sitio perfecto para relajarte, y pasar la tarde. Este bar ofrece desayunos, meriendas, comidas y cenas además de una gran variedad de tés y cócteles. Si quieres diversión asegurada, Los jueves, viernes y sábados organizan guateques para disfrutar de buena música. Dirección: C/ Espíritu Santo, 9.
Hasta su propio nombre indica que El perro y la galleta será un espacio ideal para compartir con tus peludos amigos. El nombre de este restaurante procede del amor de su dueño, Carlos Moreno Fontaneda, por sus Jack Russells, Pipa y Coco, y su legado en la familia Fontaneda. Siguiendo la filosofía y el éxito de Bar Galleta, este local te encantará tanto por la decoración como por su carta, que combina lo mejor de la cocina nacional e internacional.
Dirección: Calle Claudio Coello, 1.
Otra opción diferente a lo que estamos acostumbrados es Válgame Dios, una sorprendente combinación entre tienda de moda y restaurante. Este bar de Chueca es muy frecuentado por famosos, pero también te encontrarás mascotas, siempre y cuando estén bien educadas, que recibirán un cuenco de agua bien frío y lo que tú estés dispuesto a darles. Dirección: Calle de Augusto Figueroa, 43.
Tan sorprendente como bonito, El Huerto de Lucas es un sitio que no te puedes perder. Se trata de un espacio con mucho encanto que ofrece comida hecha con productos 100% orgánicos que llegan directamente desde su huerta. Los perros son bienvenidos a la cantina, donde será todo un lujo poder degustar su “honest food ecológica”, como ellos mismos la definen, junto a los canes, pero en la zona del mercado no se puede entrar con ellos. Ya hablamos de esta isla de naturaleza y salud en medio de la gran ciudad en el reportaje titulado ‘dónde comer sano tras los excesos de Navidad’ hace unos días. Dirección: C/ San Lucas, 13.
Por último, Vi Cool, restaurante del famoso cocinero Sergi Arola, donde podrás disfrutar de un buen vino y creativos platos y tapas para compartir mientras estás con tus amigos y mascotas. Desde que abrió el negocio el chef lo tuvo claro, los perros son bienvenidos, eso sí, siempre que sean higiénicos. Vi Cool ya cuenta con dos locales, uno situado en Huertas y el segundo, en el Barrio de Salamanca, que tiene una agradable terraza para esos días de sol y cerveza. Dirección: C/Huertas, 12-C/Lagasca, 32.
