Si en algo somos expertos los madrileños es en tradiciones. Somos castizos todos los días del año pero, en esta época tan especial, Madrid se viste con los colores de la Navidad. Y, como no podía ser de otra manera, aquí hacemos las cosas con nuestro propio estilo.
No te pierdas esta guía para vivir las Fiestas como un buen madrileño. Contagiarse del espíritu navideño de la capital es muy fácil si lo hacemos tradición a tradición:
Cuando empieza a notarse el frío en las calles del centro, en Madrid sabemos que ha llegado la hora de colocar nuestro árbol oficial: el imponente árbol de Navidad de Sol. Como siempre se ha hecho en las casas, nosotros lo ponemos donde esté bien visible, o sea, en plena Puerta del Sol.
¿Por qué nos vuelve locos nuestro árbol? Bueno, será que sus 35 metros de metal dorado nos fascinan, sobre todo cuando lo miramos desde dentro. ¡Hay que verlo para entenderlo!
El árbol de Sol es el verdadero protagonista de la Navidad. Foto: madrid.es
2. Olvídate del frío: pasea bajo las luces navideñas
Ya que has ido a admirar el árbol de Sol, puedes aprovechar para disfrutar de un idílico paseo por las calles mejor iluminadas de la ciudad. La Gran Vía o la calle Preciados están más elegantes que nunca, y tal vez sea la primera vez que miras tanto tiempo hacia arriba mientras caminas por Madrid (¡cuidado, no vayas a chocarte con alguien!). Ni te preocupes por pasar frío: tanta luz y color harán que ni te acuerdes de él dentro de un minuto.
3. ¡A la caza de regalos!
Si creías que la Gran Vía se llena a tope con los turistas veraniegos es que no la has visto en Navidad. La capacidad de esta calle centenaria es tan sorprendente como la habilidad de los madrileños para escurrirse entre los que pasean con “demasiada” calma. Pero esta aglomeración tiene mucho sentido: un sinfín de tiendas de toda clase están disponibles (a veces, con horarios bastante amplios) para encontrar el regalo perfecto.
Una vez más, se puede comprobar que en Madrid hay de todo. Así, dependiendo de tus gustos, puedes pasarte por algún mercadillo navideño o visitar tiendas originales como Curiosite. ¡Imposible no encontrar lo que estabas buscando!
4. Algo calentito, por favor
Es invierno, es Madrid y, por lo tanto, hace frío. Y, a veces, mucho. No se puede estar ahí fuera todo el día, por eso es necesario pararse a descansar entre tanta compra y tanto paseo navideño para recuperar el calorcito con algo típico de aquí.
Para los hambrientos no hay nada mejor que recuperar fuerzas un buen cocido madrileño que te deje satisfecho y con altas temperaturas corporales durante varias horas. Pero si te apetece algo más ligero, no te lo pienses y aprovecha la temporada para conocer alguna de las geniales cafeterías de Madrid. Los días más fríos pásate por los bares especializados en cereales y descubre cómo los madrileños nos mantenemos en calor.
Un café en Pelican Rouge para entrar en calor
5. Cuidado que resbala: a patinar en una pista de hielo y de visita a la nieve
La nieve de Madrid está más cerca de lo que crees. La pista de patinaje sobre hielo de Callao ya es un must de la Navidad madrileña. Cada año nos pasamos por ahí para patinar (y caernos de vez en cuando) o para ver cómo lo hacen los demás (a veces, es más seguro mirar desde la barandilla). Esta pista es más bien para pasar el rato, si te apetece algo más profesional hay otras bastante grandes. Encuentra aquí tu pista de hielo.
El patinaje y la Navidad van de la mano en Madrid
6. Revive tu infancia en Cortylandia
¿Acaso hay algo más típico de la Navidad que la ilusión de los niños en esta época? Todos podemos volver a sentirnos como ellos, con la esperanza de que Papá Noel y los Reyes Magos nos regalen eso que tanto queremos. Solo hace falta acercarse a Cortylandia: un lugar mágico con música, espectáculo y su clásico espíritu navideño que invade a todos sin hacer distinciones en la edad.
Cortylandia se encuentra en la fachada de El Corte Inglés de la Calle Preciados. Otros muchos planes para disfrutar con niños los puedes encontrar en este artículo.
7. Próxima parada: el Bus de la Navidad
Sí, en Madrid tenemos nuestro propio medio de transporte diseñado especialmente para estos días. Se llama Naviluz y es un viaje imprescindible para no perderse el espectáculo que ofrece la decoración navideña de la ciudad.
Sin duda, se trata de un paseo mágico que deslumbra a pequeños y mayores con su belleza y diversión. ¿A quién le apetece dar una vuelta?
Las luces navideñas se ven mejor desde el Navibús. Foto: EMT Madrid
8. Turismo navideño por los Belenes de Madrid
Junto a los calendarios de Adviento (los que guardan una chocolatina para cada día antes de Navidad), el Belén es la muestra por excelencia de nuestras ganas por que llegue pronto la Nochebuena. Pero, ¿qué prisa hay? ¡Si hay un montón de Belenes por visitar en Madrid! Podría decirse que hay uno por cada barrio.
Nosotros tenemos una lista de los belenes más bonitos de Madrid para distraernos de la impaciencia hasta que llegue la noche del día 24. ¡Merece la pena ir a verlos! ¿Tendrán algo que envidiar al Belén que has puesto en casa?
9. ¡Ya son las 12! Suenan las campanadas de Nochevieja en la Puerta del Sol
La Nochevieja es uno de los acontecimientos más importantes en la capital, sobre todo para los madrileños que quieren acabar y empezar el año en plena fiesta. Para vivir el cambio de año de la forma más emocionante es imprescindible encontrar un hueco en la plaza del Sol y estar atento cuando llegue la hora de oír las campanadas.
Y quien no pueda estar en el centro en Nochevieja siempre puede celebrar el ensayo de las campanadas conocido como las “pre-uvas” del 30 de diciembre. Lo más divertido de esta noche es que no se comen uvas… ¡sino gominolas!
10. ¿Hambre el 1 de enero? Huele a los churros con chocolate de Año Nuevo
Después del fiestón que nos pegamos en Nochevieja, los madrileños nos levantamos con más hambre que nunca. Es nuestra costumbre preferida estrenar el año desayunando unos buenos churros con chocolate, sobre todo en las cafeterías emblemáticas del centro.
Espera, ¿no era tu propósito del año comer más sano? Sin problema, aquí os dejamos unas deliciosas alternativas de desayunos buenos para salud: Bye Bye Sugar, Cafelito y Celicioso. (Nota: Consulta los horarios de apertura de estas cafeterías en Año Nuevo y, si no están disponibles, tienes todo el año por delante para descubrirlas).
¿En qué parte de Madrid estará el regalo perfecto?
11. ¡Ya vienen los Reyes! Y los vemos llegar en La Cabalgata
La Noche de Reyes es la ocasión perfecta para volver a ser niños durante un rato. Para que se nos pasen un poco los nervios que provocan los regalos de la mañana del 6 de enero, no hay nada mejor que alucinar con las Cabalgatas de Reyes de Madrid. Cada año las Cabalgatas son un espectáculo lleno de ilusión, fantasía y caramelos donde celebramos la llegada de los Reyes Magos a lo grande.
Aquí puedes consultar los horarios y recorridos de las Cabalgatas de Reyes de 2017.
Los Reyes Magos desfilan en la Cabalgata justo antes de venir a casa. ¡Qué nervios!
12. Después de los regalos, a comer el Roscón de Reyes (y que la suerte decida quién lo paga)
Una de las tradiciones más familiares de Madrid (y de muchos lugares de España) es el momento de compartir el roscón. Después de la visita de los Reyes Magos, toca desayunar un buen pedazo de este bollo navideño tan especial, normalmente acompañado de chocolate caliente o de un buen café.
En Madrid hay roscones para todos los gustos, y el mejor lugar para encontrar el roscón perfecto para ti es la Pastelería Nunos, donde te enseñamos cómo revivir “Cuento de Navidad” a través de los roscones.
¡Ah! Y no te olvides de buscar la sorpresa escondida en el roscón porque, según la tradición, el afortunado que la encuentre… ¡paga el desayuno!
Al rico roscón de Reyes de la Pastelería Nunos
Puede que hayas nacido aquí, que nuestra ciudad sea tu hogar temporal o que solo estés de paso. Sea cual sea tu situación, ten por seguro que la Navidad en Madrid está hecha para todo el mundo y que te sobran planes para disfrutarla. ¡Felices Fiestas a todos!