De los tiempos en los que ser cocinero estaba mal visto al nuevo concepto del chef hay un gran espacio que se llena con esfuerzo, constancia y muchas horas confiando en la cocina y trabajando en lo que te apasiona.

Desde luego, la chef Susi Díaz es un gran ejemplo del tesón y lucha, que ha pasado de montar a los 24 años su primer negocio hostelero a ganarse el prestigio profesional y reconocimiento de los críticos. Tanto es así que actualmente su restaurante La Finca ostenta una de las preciadas Estrellas Michelin y , es miembro del jurado del conocido programa Top Chef y ha sido nombrada recientemente embajadora de la gastronomía Valenciana. Sin embargo, entre sus ajetreados días ha tenido la amabilidad de dedicarnos un espacio y concedernos una entrevista.

Dicen que la cocina es un mundo de hombres y tú eres una de las pocas mujeres ha logrado entrar en el elenco de los cocineros con Estrella Michelin ¿cómo lo ves tú desde dentro, es realmente un mundo de hombres?

Es cierto que la alta cocina es casi un mundo de hombres, pero cada vez son más las mujeres cocineras que irrumpen en ella, y llegan para quedarse. No me cansaré nunca de alagar nuestra gastronomía, pues se encuentra en un momento magnífico, sin embargo, siempre he tenido el convencimiento de que nuestro mayor activo son las miles de cocineras anónimas que hay en muchos de nuestros hogares.

Del mismo modo, el ser una de las pocas mujeres que representa el amplio mundo de la cocina debe acarrear cierta presión ¿cómo lo llevas?

Presión ninguna. Al contrario, me siento muy apoyada por todos mis compañeros de profesión y cada vez se van sumando nuevas mujeres a la primera línea.

¿Cuál es el precio del éxito? ¿A qué has renunciado?

Yo he tenido mucha suerte porque mi marido trabaja conmigo en el restaurante. Sin embargo me he perdido muchos momentos de la vida de mis hijos, aunque ahora tengo la intención de desquitarme con mi nieto.

A pesar de todo el trabajo que sabemos que supone el restaurante pareces siempre contenta y llena de energía ¿cuál es tu secreto?

Supongo que va un poco en la personalidad aunque la clave es disfrutar de tu trabajo. Tener una profesión con la que no disfrutas es una condena pero pasarlo bien mientras trabajas te da unas energías tremendas.

Se habla mucho de alta cocina, cocina de vanguardia… pero ¿Qué es para ti la cocina y como definiríais tu cocina?

Cada cocina debe tener la personalidad de quien la hace. Yo soy muy sencilla a la hora de cocinar y procuro no poner en peligro la materia prima (que debe mantenerse reconocible e integra). Los protagonistas más habituales de mi carta son los productos de mercado como pescados y mariscos. Mi cocina está plagada de un aire mediterráneo con el que trato de ensalzar la materia prima.

La cocina cada vez está más extendida y, por tanto, destacar y triunfar es muy complicado, ¿Qué crees que te diferencia a ti?

Creo que hay mucha gente haciendo las cosas bien. Para destacar necesitas poner ilusión a lo que haces, esforzarte mucho y tener ese puntito de suerte.

En un sector dónde todo el mundo dice ser creativo e innovador, ¿Qué significa para ti ser realmente un chef creativo e innovador?

La innovación no es más que probar, probar y probar cosas nuevas. Las cosas no salen a la primera. Se trata de, a partir de una idea, ir mejorando continuamente hasta dar con la tecla adecuada.

En tu profesión es fundamental la creatividad ¿Qué haces cuando las musas no aparecen? ¿En qué te inspiras?

Para ello, sólo tengo que estar en el momento adecuado y aprovecharlo, pues la inspiración puede llegar en cualquier momento, cuando oigo a una señora comprar, al escuchar a los pescadores en el puerto, en el mercado etc.

Se dice que eres tremendamente perfeccionista en cada detalle ¿es posible/adecuado buscar la perfección en cada plato? ¿Qué tiene que tener tu plato perfecto?

Desde luego es muy difícil conseguirlo pero buscar la perfección en todo lo que haces es esencial para que, de vez en cuando, algo salga perfecto.
Para mí un plato perfecto es aquel que pone en jaque a los cinco sentidos. Debe presentarse de forma que llame nuestra atención, con un aroma envolvente y un toque crujiente para despertar el oído (fundamental), también debe incluir diferentes texturas y sobre todo, estar muy bueno.

Alguna vez has dicho que el cocinero ya no solo cocina, sino que también tiene que emocionar… ¿Qué sientes cuando la gente entiende tus platos y se emociona con ellos?

Es lo que hace que esta profesión merezca la pena. No hay una sensación igual.

Por último, aunque los aficionados a la cocina ya te conocían por Canal Cocina mucha gente te ha conocido a través de Top Chef ¿qué ha supuesto para ti este programa?

Es un reto precioso. Supone una gran oportunidad para difundir nuestra profesión. Además los concursantes tienen un talento increíble y contribuyen a ponerte las pilas. Os sorprendería lo mucho que el jurado aprende de ellos.