Como arrancar un trocito de mar y traerlo al mismo centro de Madrid, eso es exactamente lo que representa Lambuzo, un bar de tapas que cuenta con dos establecimientos en la capital y que es capaz de trasladar a cualquiera hasta los sabores y delicias de la gastronomía gaditana.

Su nombre fue elegido a conciencia, ya que precisamente es lo que los dueños de este rincón andaluz querían transmitir con su cocina. Que todo el que entrará tuviera unas ganas irremediables de lambucear, o lo que es lo mismo, que fuera inevitable desear probar todos los platos hasta que no quedara nada en ellos. Después de dos años en funcionamiento han conseguido su misión y han conquistado al público madrileño.

Tapas tradicionales de Cádiz se entremezclan con platos innovadores y creativos con una materia prima de primera calidad. Esto unido a su gran selección de buenos vinos, entre los que destacan un vino tinto con personalidad procedente de las bodegas muga de la Rioja y un Taberner de la crianza de Arcos situada en Cádiz, casan un maridaje perfecto.

Nada más entrar se puede apreciar que no es un bar típico de Madrid, sino que es un lugar especial lleno de detalles.  Su decoración se basa en un mobiliario sencillo, donde predomina la madera y un estilo tradicional que hace sentir como en casa. Eso sí, si hay algo que atrae todas las miradas es un botellero de hierro forjado con más de cien años de antigüedad que sostiene casi 3.000 botellas de vino perfectamente colocadas.

Pero el condimento más importante de este lugar se cuece en su cocina, que es lo que hace que cada comensal que entra se convierta en un verdadero lambuzo. Lo primero que llama la atención de su carta es el maravilloso salmorejo, todo lugar andaluz que se precie tiene que cumplir unas expectativas muy altas en torno a este plato típico, y hay que decir que ellos las cumplen a raja tabla.

Según comentan sus dueños los platos fuertes son las Croqueta de gambas al ajillo y de tortilla de camarones, están llenas de sabor y es difícil encontrarlas en otro lugar. Sería un pecado irse del local sin probar alguna de sus variadas croquetas. Está claro que le ha salido un fuerte competidor a la cocina de nuestras madres.

No podemos olvidarnos de uno de los platos más típicos de las tierras gaditanas, el pescaíto frito. Orteguillas marinas, boquerones al limón, tortillitas de bacalao, salmonetes, y pijotas son algunas de sus propuestas. Auténticas delicias traídas directamente desde el Puerto de Santa María.

Si quieres salir con un sabor dulce de este restaurante tienes que terminar probando alguno de sus postres caseros. La tarta de queso es una de las mejores opciones de la carta de dulces, su textura cremosa dejan una sensación exquisita en el paladar.

A esta irresistible oferta gastronómica le acompaña un zona de colmado o abacería. Un espacio que recupera los productos más tradicionales de Cádiz. En ella se pueden encontrar saquitos de garbanzos de Chiclana, quesos de Villamartín, aceites de Olvera o manteca colorá de Prado del Rey, entre otros.

Direcciones:
Calle Conchas,9, 28013, Madrid
Teléfono: 911434862
Calle Ponzano,8, 28010, Madrid
Teléfono: 915 13 80 59

Precio medio: Hay tapas desde los 3€ a los 5€, medias raciones y enteras, pero se puede comer bien desde los 15 a los 20€.

Horario: Los lunes está cerrado. De martes a jueves están abiertos de 13.00 a 16.30 y de 20.00 a 00.00. Los viernes y sábados de 13.00 a 16.30 y de 20.00 a 1.00. Domingos de 13.00 a 16.30
Precio medio: Hay tapas desde los 3€ a los 5€, medias raciones y enteras, pero se puede comer bien desde los 15 a los 20€.
www.barlambuzo.com