Un estudio del Oslo University Hospital noruego revela que el consumo de kiwis en la dieta podría contribuir a rebajar la presión sistólica en el caso de pacientes que presenten cuadros de hipertensión.

En este estudio, realizado con 118 individuos, se utilizaron dos grupos de trabajo. En el primero de ellos se introdujeron en la dieta tres kiwis diarios, mientras que en el otro se introdujo una manzana diaria, en un periodo de 8 semanas. Una vez transcurrido este tiempo, el grupo de control que había consumido kiwis mostraba una presión sistólica más baja.

A pesar de que el estudio no demuestra una relación directa entre el consumo de esta fruta y la disminución de la presión sanguínea, su contenido en antioxidantes naturales, como luteína o vitamina C, y en hierro, abren la puerta a la realización de más estudios en este sentido.